lunes, 13 de marzo de 2017

Está llegando!!

Nuestro embarazo transcurrió de forma normal. A mi mujer le remitió el Crohn, como ya he dicho otras veces, no soy médico, pero ya sabíamos que las enfermedades auto-inmunes "desaparecían" durante el embarazo. Y no fuimos una excepción, el cuerpo humano es la máquina más perfecta que
existe amig@s.

Cómo tod@s los que van a ser papás y mamás comenzamos a recibir impulsos consumistas. Cada vez se acercaba más la fecha y nosotros prácticamente no habíamos comprado nada. "Si se adelanta el parto tendremos que traerla para casa en una bolsa de cartón" le dije alguna vez a mi mujer. Si estáis en esta situación, tranquil@s. El tema de la ropa lo solucionamos rápidamente ya que nos prestaron un montón y luego recibimos suficientes regalos para no tener que comprar nada (así seguimos a día de hoy). No quiero mentiros, en alguna cosilla picamos, a día de hoy es difícil para todos frenar este
impulso de comprar por comprar que se nos desata con las luces y la música de las tiendas. Afortunadamente, vivir en un pueblo nos ayuda a mantenernos alejados del "monstruo consumista".

Evidentemente, algo de dinero tienes que gastarte pues una vida nueva viene en camino y tiene necesidades. Antes de ser padre comencé a ahorrar lo que pude pues todo el mundo te dice que "tener un hij@ es carísimo". Bueno, no tanto, al menos por ahora, más adelante ya os contaré. Os cuento cómo hicimos nosotros. 

Mi máxima
Solamente lo que necesite ella. Recalco la palabra necesite porque me la repito a mi mismo a diario. Trato de abstraerme para llegar a lo que es necesario porque el bombardeo del marketing es más fuerte que nosotros, no lo neguemos. ¿Qué era lo necesario? La silla del coche. ¿Por qué? Porque es
seguridad, amén de que no puedes circular sin ella. En el mercado hay sillas igual que margaritas en
primavera, "a puñaos". ¿Cómo elegir? Lo de siempre, informarse. Y cuando nos informamos descubrimos que lo más seguro eran las sillas a contramarcha. No voy a detenerme en el por qué, ya que tendría que citar leyes físicas y la verdad, no quiero aburriros.  Aquí os dejo información. Ojo que no son baratas pero es lo mejor que podéis comprar para que vuestr@ bebé viaje seguro y vosotros tranquilos.

Un espacio para ella
Esto no era tan necesario para ella como para nosotros, lo pasamos muy bien preparándolo y mientras esperábamos que llegase lo mirábamos con mucha ilusión. Como se trata de una persona, necesitará un espacio donde jugar y aprender, que a estas edades son sinónimos "ambos los dos". Mis años de estudio no me sirvieron para ganarme la vida con ello, pero sí para conocer a algunos pedagógos y sus métodos de aprendizaje. Nosotros elegimos a María Montessori que promueve la necesidad de un espacio donde el niñ@ aprenda por si mismo. Tenéis información aquí. ¿Por qué? Principalmente porque se basa en una educación respetuosa y tengo la mala manía de que me gusta que me respeten. Por otras razones también, pero principalmente por esa. No quiero daros muchas vueltas con esto, si estáis ávidos de aprender amablemente os puedo informar, sólo tenéis que pedirlo. ¿Gastos? El mueble, la alfombra, el espejo, las cajas para el mueble y el "juguete" (que me encapriché yo con el :D). Ah, y el marco con las fotos y las luces. Poca cosa, en serio, no somos muy manitas por lo que tuvimos que comprarlo todo pero me he gastado más en alguna romería :DD. Preparar el espacio no es difícil, podéis encontrar muchas páginas por Internet que os ayuden, sino aquí me tenéis. Os dejo aquí unas fotillas:





Preparando el "nido"
Llevamos ya bastante tiempo durmiendo con la gata, a algun@s os parecerá una aberración de la naturaleza. A mi me parece una muestra de cariño por parte de ella. Y si lo hacemos con ella, ¿Cómo no hacerlo con nuestra hija? Evidentemente, llegados a este punto, la respuesta es obvia, vamos a colechar. Es decir, dormimos con nuestra hija, bueno, duerme mi mujer porque así es como lo hicimos. Tenemos una cama de 1.35 en la que duermen ellas y yo me traje prestada una cama de 1.05 que pegamos a la anterior. En esta pequeña dormimos la felina y yo. No voy a deciros que el colecho sea necesario por ninguna razón, más bien es cómodo. ¿Se despierta la nena? Como la tenemos pegada nosotros nos despertamos, la consolamos y a seguir durmiendo. Si estuviese en otra habitación tardaríamos en oírla, tendríamos que salir a la otra habitación, consolarla y seguir durmiendo y ojo que esto no es una vez a la noche!. Es una cuestión práctica, sin contar el calor que recibe ella de tenernos pegados!. ¿Que si no tenemos miedo a aplastarla? Soy sincero, el primer día en el hospital tuve que irme porque me aterrorizaba verlas juntas en una cama tan pequeña pero de nuevo me tuve que rendir ante la sabia naturaleza Así quedó nuestra habitación preparada para el colecho:


¿Qué más hicimos? Ah sí, repatriamos un "sinfonier" para meter toda la mini-ropa que nos fueron trayendo, que parecía poca pero nos llega de sobra :). Y nada más, como podéis ver no es tan caro el asunto, me he gastado bastante más en entradas de F1, por ejemplo. Todo eso hicimos y con ello sobrevivimos, imagino que os asaltará un mar de dudas y preguntas. ¿Qué como hacemos sin ...?
¿Y sin ...? Os contesto a todo sin problema y recordad que mi intención es contar cómo lo hicimos nosotros, no sentar ningún tipo de cátedra o dogma, cada uno que haga como vea, eso sí, informándose. Saludos hermos@s!!

P.D. Si esperabais leer sobre el parto, lo siento. Pero tranquilos, no tardaré :)

No hay comentarios:

Publicar un comentario